"sean alegres. Caminen sin temor..." Acta 27

Tuesday - Sep 13 2016

De nuestros sacerdotes - escuchar: 

..."Qué pueden temer los que son hijos de la Luz y van en ella?

No teman. Yo he vencido al mundo, al demonio y a la carne.

Apártense de ellos, eso sí. No sean imprudentes ni insensatos.

Irradien la gracia que les doy.

Den a todos la alegría que nace de mi gracia.

Quién que sea bañado por la luz no es luminoso, no va iluminado?

Hijo: Yo basto.

Por eso sean alegres.

Caminen sin temor.

No como los muertos que velan a sus muertos; si no como los vivos que comparten con sus vivos.

Recuerdas aquel pasaje del Evangelio en que se me pinta Camino de Emmaús, con dos discípulos? ...

Bien: si lo recuerdas, observa esto: mi mensaje fue gozo. Hacerles entender que no había por qué andar como quien está desesperado; sí Yo no solamente soy una esperanza, sino la vida, la plenitud, el ser. Si Yo Soy el que Soy y no fallo; no paso, no dejo de ser el que Soy.

Por qué no confiaban en mis palabras?

Por qué no tenían la certeza de que si bien había ido a la muerte, Yo resucitaría con la Vida, para no perderla y dársela a los creyentes; a todos los salvados?

Por qué no vivir en Salvación y disfrutar el gozo de ser salvados?

Por qué andar como los que nada poseen, lamentándose llenos de tristeza?

No, No está bien. Ustedes canten. Rían, Contagien la esperanza y la alegría; Más: contagien la Certeza de tener un Salvador; de ser salvados.

No pregonen mi fracaso; que no existe. Den mi triunfo. Participen la Resurrección.

Hablen de esto, a todos los pueblos, instruyéndolos en la Verdad. Y la Verdad es: que Yo soy.

No se hagan eco del pregón de los malvados, que, oyendo a Satanás, me niegan.

Ser tristes es una manera de negarme.

Es que no entienden? - Fíense en Mí. No desesperen. No desesperen. No desesperen. Esto es: tengan certeza de mi Salvación. Y mi Salvación soy Yo y Yo no fallo. Yo vivo. Yo vivo. Yo vivo.

Créanlo.

Nada prevalecerá en contra mía y sobre Mí.

Qué pueden, entonces, temer para estar tristes?

Den lo que tienen. Den eso. Hablen de eso. Y lo que ustedes tienen es Un Dios Salvador. Que es Salvación.

No compartan el pesimismo de los desesperanzados, que consultan Oráculos mundanos y caducos.

Que fincan el mañana en sus cábalas que pasan.

No se paganicen.

Dejen que los sin Dios lloren su soledad, entre su "dios", el "dios" de ellos, que no tiene luz, porque no es de la Luz. Los hijos de la LUZ sean luminosos.

Abran el corazón.

Dejen que, de él, broten ríos de agua viva; esto es, de salvación.

Qué otro modelo tienen que un Dios que eso hace; que así obra?

No les han contado mis hijas Josefa y María Margarita, cómo me han sorprendido, con un Corazón desbordante de amor?

Yo soy Amor y el Amor no se detiene no es agua remanzada, es catarata que desborda y que se da.

Llenen la tierra de amor. Repiquen campanas de alegría. Que todo sea Navidad a partir de los que creen; porque Yo, el Salvador, me encarno a cada instante en los que creen.

Si Yo no viviera, ustedes tendrían por qué estar desesperados; estar tristes.

Pero Yo vivo. Y mi Madre, que lo creyó y lo sabe, está peregrinando en medio de ustedes, con un mensaje claro:

"Miren a mi Hijo. Crean en Él."

Acta 27

Bogotá,  Junio 8 de 1985

Sabado - 5:10 a.m.