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Leccion Numero:
Lección
No. 149
Vivan y propaguen el Seminario "María, Señal de Jesucristo"
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Es tiempo de aplicar todo el cuidado y atención posibles al modo de hacer del seminario "María, Señal de Jesucristo".
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No olviden la importancia de cada una de las partes y los pasos en que, él, se divide.
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Cada parte y cada paso tiene su finalidad específica, cuya observancia garantiza el resultado.
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Una observancia correcta y cuidadosa de las partes y de los pasos del seminario, permite que se reciba, se viva y se dé a Jesucristo, posibilitando la cristofinalización del hombre y de todo.
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La actuación inadecuada, impide la eficacia de los resultados. No hay cristofinalización.
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Cada paso y cada parte del seminario, tiene su carisma y su característica individual y propia. No observarlas, es desatinar.
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El seminario debe presentar una imagen o visión clara y perfecta de María, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen, para ser imitada, si se quiere acertar.
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Si el seminario se hace bien, quien lo hace y vive, vive y obra como María.
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Todo el ser y el hacer de María están vinculados con el proceso: recibir, vivir y dar a Jesucristo, el Salvador, para cristofinalizar.
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El seminario debe dejar como resultado, el estilo de ser y hacer, como María, en quien lo hace.
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Hecho el seminario debe enseñarse còmo garantizar la permanencia y eficacia del seminario, mediante la formación de células trinitarias o reuniones de tres en tres personas.
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Las células deben reunirse frecuentemente, para que sus miembros crezcan y perseveren.
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Las diferentes células también deben reunirse con la periodicidad que les sea posible, con el mismo objeto.
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Cuando, en el seminario, den testimonios, los cuales buenos son, que no sean excesivos. Deben ser ágiles, como todo el seminario; por lo mismo, cortos en su duración. No son conferencias ni pasos o charlas, sino brochazos ilustrativos de aquellas.
- En todo imiten a María. Ella es el Modelo.