Lección 122 Reglas Vitales para ser Esclavos de la Esclava de Dios de la Orden Trinitaria de los Simples.

Leccion Numero: 

122

 

Lección

Nº 122

Reglas Vitales para ser Esclavos de la Esclava de Dios de la Orden Trinitaria de los Simples.

 

 

 

  1. Imiten a María.
  2. María, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen, sea la Madre, Maestra, Modelo, Misterio, Mensaje y Mandamiento de Dios para ustedes.
  3. Como María, sean limpios. Para eso: báñense, limpiándose a fondo en el sacramento de la Reconciliación. Confiésense a fondo y regularmente con el sacerdote. Que el sacerdote los oiga y los perdone.
  4. Como María sean mansos y humildes de corazón. Saquen de ustedes toda clase de estorbos morales y físicos. Libérense del odio, del rencor, del miedo, de la soberbia, de la mentira, del pecado en todas sus formas. No se hagan servir. Ustedes sirvan. No se hagan comprender. Ustedes comprendan. No se hagan perdonar. Ustedes perdonen. No se hagan amar. Ustedes amen. Sean ustedes instrumentos de paz, con el modo pacífico como ustedes vivan y obren.
  5. Como María, ustedes oren. Sean oración. Que la oración en ustedes sea un estado natural consubstancial a sus propias vidas, como respirar. Oren para todo, por todo y con todo. No discriminen sus tiempos entre sus quehaceres y sus oportunidades de orar. Que orar sea igual que respirar, en ustedes. Que no haya ningún acto vital en ustedes que no sea oración. Más aun: que todo en ustedes sea oración. Esto es: que todo en ustedes sea fruto de la presencia de Dios en ustedes. Dios es la vida. Sin la vida no dan frutos. Por eso, no lo olviden. Nada pueden sin Dios. Con Dios todo lo pueden. Este es el secreto de María, la Inmaculada Concepción y Siempre Virgen.
  6. Como María, tengan como única finalidad recibir, vivir y dar a Jesucristo, el Salvador Resucitado. Si esto tienen y esto dan, todo lo demás les será dado como por añadidura y todo harán como por añadidura. Pues Dios, quien todo lo puede, hará en ustedes, con ustedes y a través de ustedes, todo lo conveniente y eficaz, para ustedes y para los otros sus hermanos. Él es el Salvador y es el Salvador del hombre y de todo lo del hombre. 
  7. Como María, no pregonen. Hagan. No demuestren, muestren.
  8. Observen e imiten los silencios de María, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen. El silencio de María es dialogo interior con el que Es y por lo mismo, eco viviente de la palabra del que en sí, es la Palabra.
  9. Rescaten el sentido y valor de las palabras, viviendo en la Palabra del que es la Única PALABRA.
  10. Como María, den al mundo y a los hombres, sus hermanos, a Jesús Resucitado, la Única Palabra real y Verdadera. En el mundo, las palabras del hombre son cada vez menos serias y veraces; porque, en el mundo, cada vez el hombre se aparta más y más de la Palabra real, Única y Verdadera que es Jesús, el Salvador Resucitado.
  11. Como María oren. Sean oración. Respiren oración. Esto es: vivan a Dios. Respiren a Dios.
  12. Como María, permanezcan en la Iglesia Verdadera, católica, apostólica, romana, sujetándose a sus jerarquías naturales, no importa quienes y como sean, personalmente en ellos, sus jerarcas.
  13. Sean esclavos de María, la Esclava de Dios por amor. Esto es ser liberados. Solo esta liberación de Esclavitud por amor, los hará libres. Nadie es más libre entre todas las creaturas, que María, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen. Por eso el pecado no la alcanzó en ningún tiempo y forma, ni siquiera en su forma original. Por eso nada pueden en su contra el mundo, la carne y el demonio. Por eso, Ella es la toda Llena de Gracias que aplaste la cabeza del rebelde, del impotente y perverso Satanás y destruyó sus ejércitos malvados. No dejen de orar.

 

 

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